Que pasa cuando una relació se acaba? Como nos sentimos cuando estamos vinculados a una persona y esa persona ya no está con nosotros? Que nos depara la vida cuando realmente habiamos construido un proyecto con el otro y ese otro ya no está?
Cuando la relación de pareja se ha vuelto ya caduca, es por que una de las dos partes decidió seguramente finalizar el acuerdo con la otra mitad.En ese sentido, al no poder aguantar uno de los dos la situación por cualquier circunstancia lo que se produce en la parte que si quería mantener la relació es un profundo vacío por la ausencia de un ser querido. Es un vacío energético que corresponde a la otra mitad que ya no está, su energía que nos complementaba se disolvió
y solemos quedarnos con trozos de la vida de la otra persona. Entre ellos el recuerdo, que es el que más nos angustia y nos provoca dolor, luego están las cosas materiales que también nos recuerdan a la otra persona, y también hay un recuerdo en el hábito de hacer las cosas que habíamos adquirido con la otra persona. En ese sentido, si el sentimiento era muy grande, al no haber esa persona nos hace recordar quien somos ahora que ya no está el otro allí, si las cosas que haciamos las haciamos por el otro , ahora que ya no está por quien las haremos y seguramente que nos cuestinaremos que hacemos
con esos patrones que seguramente habíamos adquirido del otro. Puede ser que ya no nos sirvan que tengamos que buscar nuevas metas, pues si el otro ya no está deberemos de reinventarnos para buscar otra versión de nosotros mismos, o seguir en la energía del otro hasta que encontremos otro complemento propio.
Pero antes de que todo esto llegue deberemos pasar, como no, un luto, un luto consciente que corresponde al abandono seguramente, que corresponde al no haberse visto apreciado, al dolor de no tener a alguien al lado con quien poder experimentar, algunas personas habrán buscado la seguridad en el otro y ahora ya no está, en definitiva todo un vacío que puede llevarnos a una gran depresión o crisis.
Es muy importante que en estos periodos encontremos la calma suficiente para poder RE INICIAR nuestras vidas, volver a darles un aire fresco. Los cambios deben de darse en el ciclo de la vida, y en los tiempos que corremos los cambios cada vez son más inevitables, hay muchos movimientos, estamos intentando encontrarnos a nosotros mismos y en ese ir y venir tenemos que compartir experiencias con los demás seres. Es un buen momento para poder expresarnos con
más personas y abrirnos a otras experiencias que hagan de nosotros seres más completos, con un amor incondicional hacia nosotros mismos, capaces de SER y EXPRESAR desde el corazón y por supuesto que cuando el corazón habla los demás serán al menos comprensivos con nosotros mismos. La fase inicial de luto es importante, hay que interiorizar ese dolor pues corresponde a una experiencia que tiene que ser integrada en el SER. Una vez se ha integrado esa pérdida, no debe verse
como tal sinó saber que en ese transito de experiencia con otra persona busquemos, en el pasado, experimentar ciertas facetas del SER que ahora se deben de actualizar con nuevos valores, debemos de volver a empezar, volver a construir pero mejor, cada vez con más consciencia, más presentes y con mayor sabiduría para así cuando vuelva a aparecer una nueva relación de pareja y hayanos integrado el dolor por la pérdida, podamos amar a la otra persona de otra forma diferente,siendo más genuinos con nosotros mismos y aun sabiendo que podemos volver a ser heridos. Pero en ese sentido amaremos de forma diferentes pues no se repiten las mismas experiencias a no ser que estemos muy apegados a formas de hábitos y conductas obsesivas y no hagamos un viaje interior hacia nosotros mismos, sinó el efecto contrario se produce, volcaremos nuestros hábitos sobre el otro y puede ser que intentemos hacer de la nueva experiencia algo que ya no corresponde , es sumamente importante entender que la nueva experiencia es diferente, que no será igual , que no podemos ser iguales, pues en cada relación nos hacemos más evolutivos. Entonces cuando uno sabe amar, cuando uno se siente libre de amar, después de las perdidas, uno sabe amar de otra forma, no como lo había creído al principio, pues cada nueva relación le aportará una nueva visión del amor, en la cual entenderá que realmente no hubo nunca una pérdida sinó un cambio en como la consciencia trae una forma diferente para que él mismo pueda expresar su amor de una forma más completa , diferente, más evolucionada, cada vez que viene una pareja nueva nos descondicionamos más de los valores caducos.
Toda relación de pareja es una oportunidad de crecimiento personal dónde uno ve reflejado en el otro lo que quiere expresar y sentir, se encuentra en frente de sí la proyección de su propia luz y su propia sombra, entendiendo este juego maravilloso de la existencia cíclica, uno no puede más que maravillarse por la genialidad de la dualidad y uno no le queda más que amar de una forma completamente renovada, nueva, jovial, feliz y exaltante. Sólo así, con un corazón sin miedo, completamente desapegado de los patrones antiguos que vivimos y que se fueron en forma de luto, sin remordimientos, sin resentimientos, sin sentir pena, nostalgia, ni culpa, sin sentirse no querido, con un corazón renovado, o lleno de tiritas, sabiendo que hemos amado de la mejor forma, sin buscar culpables pues al nivel de la mente no los hay , uno puede amar y uno puede gozar de nuevas experiencias.
Sólo de esa forma, con la renovación constante de experiencias uno puede sentirse nuevamente renovado, nuevamente amado, pues al final si uno desea amar siempre se nos pondrán oportunidades enfrente para amar verdaderamente, y no necesariamente una nueva pareja, o acaso no se cuestionaron que otro objetivo tendría la vida si no fuera experimentar el AMOR?.
En el Gabinete de Psicología Aplicada Iluro te ayudamos y acompañamos en tus procesos de duelos para que puedas reconectar con tu verdadera naturaleza a fin de que vuelvas a ser una persona más completa, más feliz, más libre … y recuerden, liberense de sus miedos, sean ustedes mismos y amen y gozen de su plenitud.
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